Tipos de cimbras metálicas y de madera
15.12.2023
La construcción es una disciplina que no ha parado de evolucionar y que se va adaptando a las necesidades de la sociedad. Entre todas las herramientas y técnicas que existen en la actualidad, las cimbras en construcción han sido pilares (y nunca mejor dicho) clave en la arquitectura.
Las cimbras constituyen un papel fundamental en la construcción de andamios y en las cimentaciones de las estructuras. En función de su tipología (metálica o de madera) tienen unas aplicaciones u otras. Del mismo modo sucede con los cursos de prevención de riesgos laborales: si se tratan de estructuras de madera o estructuras metálicas serán necesarios unos conocimientos u otros. Si te surge alguna duda sobre cuál es el óptimo para ti, aquí nos tienes para resolvértela.
Sin más dilación, nos adentramos en el mundo de las cimbras: su definición, tipos y aplicaciones más comunes. ¡Vamos allá!
Cimbras: definición
Una cimbra en construcción es un elemento que sirve para sustentar estructuras previas al fraguado. Entre sus funcionalidades está mantener el fresco hasta que se endurezca, evitando así que la estructura se deforme por una mala posición. Las cimbras, sean del material que sean, deben caracterizarse por su rigidez, resistencia y limpieza. Además, como es de esperar, deben cumplir con las leyes de seguridad vigentes.
Las cimbras de cimentación necesitan de elementos adicionales para dar mayor soporte para el moldeado perfecto. Algunos de ellos son las cimbras de entramado, los puntales, que aumentan la capacidad de carga, o las celosías, que refuerzan los empujes laterales.
Funciones principales de las cimbras
- Moldear y retener una estructura concreta.
- Impedir que se pierdan elementos durante el fraguado.
- Asegurar la posición de las armaduras y recubrimientos de la estructura.
- Resguardar el cemento de las temperaturas externas.
- Garantizar la seguridad del espacio de trabajo.
Cimbras metálicas
Las cimbras metálicas habitualmente están hechas de acero o aleaciones de aluminio. Entre sus principales ventajas se encuentran su resistencia y su durabilidad en el tiempo. Este tipo de estructuras en construcción se emplean para soportar cargas especialmente pesadas, proporcionando así mucha estabilidad y resistencia al elemento que estemos construyendo. Uno de los beneficios que más se resaltan de las cimbras metálicas es su eficiencia, puesto que pueden reutilizarse sin problema en diferentes proyectos.
Ventajas de las cimbras metálicas
- Su resistencia en estructuras, tanto por la parte que respecta a su capacidad de carga como también por su buena adaptabilidad a temperaturas y climas extremos. Se trata por tanto de una de las opciones más seguras a la hora de recurrir a estos elementos de construcción.
- Reutilización para otros proyectos. Como comentábamos al inicio, la durabilidad del metal hace que puedan reciclarse para futuros proyectos siendo así la opción más económica y reduciendo el impacto en el medio ambiente.
- Flexibilidad, y no precisamente en la del material, sino en la del diseño. El metal es muy maleable y permite crear cimbras totalmente adaptadas a las necesidades de cada proyecto.
Inconvenientes de las cimbras metálicas
- Aunque las cimbras metálicas son muy resistentes, se debe tener en cuenta que su peso es en ocasiones excesivo, lo que dificulta su transporte y manipulación en algunas construcciones.
- Los costes iniciales pueden dispararse, sobre todo si se necesita producir unas cimbras de una altura o grosor determinados. Sin embargo, como mencionábamos, gracias a su capacidad de reutilización estos costes se pueden amortiguar en el medio largo plazo.
- La exposición a algunos climas determinados puede llevar a la corrosión del material. Por tanto, las cimbras metálicas requieren de un mantenimiento constante para garantizar su durabilidad en el tiempo.
Cimbras de madera
Las cimbras de madera han sido elementos indispensables en la construcción a lo largo de la historia. De hecho, estas fueron desde el inicio las más utilizadas hasta que evolucionaron las técnicas de cimentación y pudieron empezar a emplearse con mayor frecuencia las metálicas. La calidad de las cimbras de madera es indispensable debiendo tenerse en cuenta que no estén torcidas ni deformadas, sin superficies irregulares y sin problemas derivados de construcciones anteriores (como hongos o humedades excesivas).
Ventajas de las cimbras de madera
- Su ligereza lo hace muy atractivo por su fácil manipulación y transporte, haciendo que se adapte muy bien a cualquier tipo de proyecto de construcción con estructuras de madera.
- Su coste inicial es muy bajo en comparación con las cimbras metálicas. Si se trata de un proyecto con presupuestos ajustados, es una de las mejores opciones.
- La madera es un recurso renovable, lo que hace que su producción y procesamiento se traduzca en un impacto ambiental menor que las de las hechas de acero.
Desventajas de las cimbras de madera
- Las cimbras de madera tienen una capacidad de carga menor que las cimbras metálicas, lo que hace que tengamos que prescindir de ellas en algunos proyectos que lo requieran.
- Su fragilidad ante ciertas condiciones climáticas las hace poco atractivas en función de la región donde se lleve a cabo el proyecto arquitectónico. Su vida útil tiende a reducirse sobre todo cuando hablamos en términos de humedad en el ambiente.
- La durabilidad también tiende a reducirse relacionándose con el punto anterior si las comparamos con las metálicas. Si se dañan, su capacidad de carga puede verse afectada, por lo que debe realizarse un mantenimiento y revisión constante.
¿Qué tipo de cimbra necesito en construcción?
Una vez hemos hecho un repaso a los principales pros y contras de las cimbras metálicas y de madera, es hora de seleccionar una u otra en función de la aplicación que queramos darle.
Las cimbras metálicas no son mejores que las de madera, ni viceversa. Cada una será más útil en función del proyecto en el que estemos trabajando. Para proyectos que requieran de una capacidad de carga alta y durabilidad a largo plazo, las cimbras metálicas serán la mejor opción. Sin embargo, si estamos hablando de proyectos más ligeros (como obras en interior de viviendas o espacios reducidos) y en los que se necesita sostenibilidad y reducción de costes iniciales, las cimbras de madera serán la opción perfecta.
La realidad es que en la práctica, en muchas ocasiones se combinan las cimbras metálicas con las de madera. Los encargados de obra suelen utilizar las metálicas para zonas más críticas y expuestas, mientras que las de madera se emplean en secciones donde la capacidad de carga no es el objetivo principal.
En definitiva, decidirse por una u otra es un cúmulo de factores como el rendimiento, el presupuesto o consideraciones relacionadas con el medio ambiente. Cada elemento tiene sus fortalezas y debilidades y, por tanto, el criterio a la hora de elegirlas será clave para garantizar el éxito y viabilidad del proyecto.
Cuéntanos, ¿cuál ha sido tu experiencia con unas u otras? Si quieres compartir tu opinión, puedes hacerlo en nuestras redes sociales.
Os esperamos en el próximo artículo. ¡Hasta pronto!
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